Ah, ¿pero hacemos algo? podéis preguntaros. Pues sí, ni mucho menos estamos inactivos, nuestro cuerpo aparentemente sí lo está, pero solo aparentemente. Veamos pues qué es lo que hacemos mientras dormimos.
Regeneración del cuerpo físico
En primer lugar, una de las cosas que hace nuestro cuerpo es desintoxicarse y regenerarse, para ello, cada órgano tiene su franja horaria durante la cual trabaja con mayor intensidad: la vesícula biliar lo hace de 11 de la noche a 1 de la madrugada, el hígado de 1 a 3, los pulmones de 3 a 5, y el intestino grueso de 5 a 7. Si nos despertamos en uno de éstos horarios significará que hay algo en el órgano que corresponde que no anda muy bien, aunque si es la vesícula biliar la que está afectada, lo que puede ocurrir es que también nos cueste conciliar el sueño.
Asegurarnos de seguir la ruta correcta
A otro nivel, cuando dormimos plácidamente lo abandonamos para, desde otro nivel que no es el puramente intelectual, hacer una revisión de todo lo vivido durante el día y que comprende todas las actividades, relaciones con los demás y con nosotros mismos, que nos permite evaluar nuestro día a día para que, si es necesario, hacer todos los “ajustes“ que hagan falta.
En éste espacio tenemos la oportunidad de entrar en contacto con esa otra parte de nosotros mismos que vive en un nivel más sutil, podemos llamarle energía, Yo Superior, Espíritu o Alma, el nombre es lo que menos importa, para asegurarnos que como personalidad vamos a seguir fieles a las metas que tiene y no apartarnos de ellas. También las energías que nos acompañan siempre, ya incluso antes de nacer físicamente, están con nosotros para ayudarnos y guiarnos en toda ésta tarea.
La función positiva de las pesadillas
Cuando tenemos pesadillas, especiamente repetitivas, una parte nuestra nos está avisando que hay algo en nuestra vida que todavía está por resolver. Pueden aparecer sueños que reflejan claramente situaciones del pasado, incluso cuando eramos muy pequeñlos, o situaciones del presente, aunque no siempre se presentan de una forma clara y evidente, si no que lo hacen con un lenguaje simbólico que muchas veces necesitaremos descifrar.

Para descifrarlos no siempre sirven los manuales de interpretación de sueños, ya que cada cultura social, familiar y lo más principal, cada lenguaje individual es diferente y no siempre se basa en los mismos patrones. Lo importante en estos casos es sumergirse en el sueño, revivirlo y extraer las emociones, asociaciones y conclusiones que se vayan produciendo.
Sueños-ensayo
Al igual que los actores y músicos ensayan antes de hacer la representación oficial, nosotros también podemos ensayar lo que necesitamos desarrollar en la vida cotidiana. Por ejemplo, si necesitamos afrontar situaciones que nos dan miedo, mientras dormimos podemos hacer ensayos de capacidades y habilidades para afrontar esas situaciones. En terapia siempre acostumbro a preguntar por los sueños, así, cuando una persona relata un “sueño-ensayo” y acostumbra a pasar muy a menudo cuando se toman las Flores de Bach, ya se que vamos por buen camino y que las puertas de lo que le es difícil se van abriendo.
Otro ejemplo, si se tienen dificultades para expresar emociones que creemos que son peligrosas, como el enfado, pero se relatan sueños de que ese enfado se ha expresado o diciendo las cosas claras a alguien, es que la persona ya está preparada, o al menos más preparada, para hacerlo en la vida “real”, y lo pongo entre comillas, porque es tan real esta fase de la vida como cuando estamos despiertos.

Hallar soluciones mientras dormimos
Todos hemos dicho alguna vez “voy a consultarlo con la almohada” ¡cuánta sabiduría, muchas veces perdida, encierran estas frases populares! porque denotan lo que pasa en realidad. ¿Os ha pasado alguna vez que os habéis ido a dormir con un problema, sea al nivel que sea, y al despertaros os ha venido la solución?
Muchos científicos relatan eso mismo, probablemente sin ser conscientes de lo que ha pasado, de toda la actividad que tiene lugar mientas dormian. Porque otra de las cosas que hacemos, es compartir aprendizajes con las personas con nuestras mismas inquietudes, o con las que nos pueden aportar conocimientos que necesitamos desarrollar y ésta es una forma importante que tenemos de aprender más rápidamente.
Encuentro con los seres queridos que ya marcharon
Si, nos reunimos con los seres con los que mantuvimos y mantemos una relación de amor, puesto que los lazos de amor que creamos siempre permanecen vivos sin importar el tiempo que transcurra. Por eso, por mucho dolor que nos cause la pérdida física de un ser querido, «solo» es eso, pérdida física, porque como decía anteriormente, siempre estaremos unidos por los lazos de amor.

Sueños premonitorios
Por último, están los sueños reveladores de situaciones nuevas que están por venir, e incluso de sueños premonitorios que nos advierten de qué camino no hemos de seguir. Este hecho a veces se presenta como algo «paranormal», pero no hay nada más normal para nosotros que al dormir viajemos sin las limitaciones que nos impone el tiempo y el espacio que tenemos dentro del cuerpo fisico.
El problema se puede dar cuando al despertarnos la mente distorsiona las vivencias y los mensajes, haciéndolos a veces totalmente incomprensibles. Pero, aunque esto suceda, siempre puede quedar una vela encendida que nos iluminará los caminos por los que necesitamos pasar, aunque sea a nivel inconsciente.
¿Hay alguien que todavía pueda pensar que dormir es una pérdida de tiempo?
De ahí la importancia de poder dormir bien, evitar los hábitos y sanar las emociones que no nos permiten dormir profundamente. Hablaré de esto en otro artículo y también por qué hay personas, o periodos de tiempo en que no soñamos, o al menos no recordamos los sueños.
Si leéis esto de noche, que tengáis unos dulces, reparadores y productivos sueños y si lo hacéis durante el día, que podáis seguir el camino que os hayáis trazado en ese otro nivel.
Un abrazo y hasta la próxima.
Montserrat Chando – Psicoterapeuta