Primero quería matizar la diferencia entre “estar depre” y una verdadera depresión. Cuando estamos “depres” suelen ser estados pasajeros, y posiblemente por causas que no implican cosas o circunstancias trascendentales para nosotros, aunque no dejen de ser desagradables.
La noche oscura del Alma
Cuando hablamos de depresión, hablamos, como la definió San Juan de la Cruz, de que la persona se encuentra sumida en “la noche oscura del alma”. Es un estado de tristeza sumamente profunda, en ocasiones no exenta de desesperanza, teniendo la sensación que se está viviendo dentro de un pozo negro, siendo la percepción de uno mismo, de las circunstancias y del mundo en general muy negativa.
Existe también una pérdida de interés por las relaciones, aunque sean seres queridos, por la comida, la sexualidad, el trabajo, incluso por la vida, lo que puede llevar a adicciones y drogadicciones como medida para no acabar de caer en el pozo profundo, o en casos extremos, al suicidio. Es muy habitual que se acompañe de angustia y ansiedad y, aunque sea paradójico, de episodios de euforia, puesto que ésta es solo el reverso de la moneda.
Síntomas físicos y mentales
Algunos de los síntomas físicos y mentales, son la dificultad o imposibilidad de un sueño reparador, opresión en el pecho, cansancio casi infinito en casos muy profundos, enlentecimiento mental y monotonía de ideas. Hemos de tener en cuenta también que dentro de un estado depresivo existen muchos grados, casi tantos como personas, abarcando desde una depresión leve, a una profunda, pero al fin y al cabo, todos lo son..
Se podría hacer una lista larguísima con todos los síntomas físicos, emocionales y conductuales, porque realmente existen, pero de lo que más me interesa hablar hoy es de las causas que nos pueden llevar a una depresión, y muy especialmente cómo salir de este estado totalmente renovados.
Causas de la depresión
Hay depresiones que desde una mirada superficial podríamos decir que son por causas externas, como pérdidas importantes, ya sean materiales o afectivas, pero que si nos adentramos en la persona veremos que la principal causa es por cómo lo está viviendo. Con esto no quiero decir que al sufrir una pérdida importante no nos deberíamos sentir tristes, o incluso desesperados, puesto que las emociones forman parte de nuestra humanidad, sino que no se tiene la capacidad de superar las circunstancias en el tiempo, por tanto ya estamos hablando también de causas internas.
Como causas internas – en psiquiatría se le llama depresión endógena – podemos hallar emociones que no se ven a simple vista, pero que se debería investigar qué papel juegan, como el sentimiento de culpa, la represión de la ira, ansiedad y angustia, baja autoestima e impotencia para hacer frente a las circunstancias y a la vida, profundas carencias afectivas y soledad, reflejadas incluso en las actuales relaciones de pareja, episodios o incluso traumas de infancia no sanados, miedos que no dejan avanzar o que incluso paralizan a la persona.
Difícilmente será una sola de todas estas causas que he enumerado, sino que lo más probable y lo que vemos siempre, es un cúmulo de todas ellas entretejidas y afectando simultáneamente.
En una etapa de depresión profunda es importante la comprensión
De poco o de nada sirve decirle a una persona realmente deprimida, que se alegre por todas las cosas buenas que tiene, o que se distraiga, puesto que, si las causas son internas, poner cosas encima para taparla no ayudará en absouto, porque como escribií en un artículo anterior, cuando el corazón se rompe, sanarlo no es una opción, es una prioridad del Alma.
Tampoco servirá de mucha ayuda, el decir o pensar, que es una egoísta, porque solo piensa en ella, a menudo he oído decir, incluso a profesionales de ayuda, que la depresión es una enfermedad del egoísmo, porque muchas veces la depresión es el penúltimo grito del alma para que miremos dentro.
¿Cómo salir y sanar la depresión?
Primero de todo con comprensión, para poder indagar en las verdaderas causas, quizás, si no lo podemos hacer por nosotros mismos, podemos acudir a un profesional para que nos ayude, no solamente a encontrarlas, sino también a ver la inmensa capacidad de sanación que todos llevamos dentro a través de un proceso de psicoterapia en el que vamos adentrándonos en nuestras emociones y vivencias que están en el origen de esa depresión, comprendiendo así cómo hemos llegado hasta ella, puesto que sin comprensión se hace mucho más difícil un cambio porfundo y duradero. Y lo más importante: sanando todas y cada una de las vivencias y relaciones que las han generado.
En este proceso de introspección y conocimiento interior, las Flores de Bach son también de una inmensa ayuda, aportando una energía sanadora para todas y cada una de las emociones y estados, tanlo los más visible. como la depresión, como las más profundas y muchas veces inconscientes, como las descritas más arriva.
La depresión también puede contener una sabiduría interna
Por último, no olvidemos que en no pocas ocasiones pasar por un periodo de nuestra vida que es como “la noche oscura del alma”, si sabemos ver la parte más positiva, nos ayudará a entrar en los rincones de nuestro corazón que un día cerramos con llave, para acoger con amor las lágrimas quizás nunca derramadas y que están gritando para que por fin las liberemos.Y si es cierto, que después de superar una depresion crecemos interiormente y salimos fortalecidos.
Puedes llamarme para poder tener una consulta gratutita para consultar lo que necesites.
Montserrat Chando
Psicoterapeuta
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