Os dejo aquí algunas razones prácticas por las que utilizar las Flores de Bach, pero seguro que hay muchísimas más que podréis ir descubriendo.
Sanan todas y cada una de nuestras emociones en desequilibrio y evitan que lleguen a afectar al organismo físico en forma de trastornos o enfermedades.
Podemos trabajar también a nivel de síntomas físicos, siempre y cuando el daño no sea ya irreparable por haber estado largos años gestándose.
La sanación no se produce de una forma pasiva, como cuando esperamos que algo o alguien nos cure desde fuera, si no que despiertan nuestra conciencia interior para que nos demos cuenta de lo que necesitamos sanar y mejorar. Por lo tanto nos ayudan a crecer
No solamente sanan las emociones y heridas de nuestro corazón, si no que despiertan nuestras mejores cualidades latentes para que las podamos hacer florecer.
Carecen absolutamente de las contraindicaciones y efectos secundarios de los productos químicos, que aunque a veces puedan ser necesarios, a la larga afectan negativamente al organismo, tal y como lo reconoce la misma medicina oficial.
Con ellas podemos trabajar a nivel de síntomas, como por ejemplo, la angustia, ansiedad, nerviosismo y depresión y a la vez, con las causas que son el origen de los síntomas, con lo cual la sanación será siempre duradera y definitiva
Se pueden beneficiar de ellas los niños, ancianos, animales y también las plantas.
Son remedios que se obtienen de plantas silvestres y se elaboran de una forma ecológica, respetando el medio ambiente.
Con los conocimientos necesarios de botánica para poder identificarlas en el campo y saber elaborarlas, lo cual está al alcance de todos, nosotros mismos podríamos preparar nuestros propios remedios sin depender de nadie.
El precio es prácticamente asequible para todos.
Y por último, si yo las pudiera definir con pocas palabras diría – y digo – que son un regalo del Cielo en esta época que estamos viviendo, a veces tan difícil, para que podamos evolucionar más rápidamente. Creo que no se puede pedir más.
Montserrat Chando Psicoterapeuta
Conoce cómo te pueden ayudar cuando forman parte de la Psicoterapia Integrativa